Página La Poderosa
APUNTS DESPRÉS DE L'ANTIC - GABINET DE CRISI
Vaig escriure aquest text després de les primeres presentacions del nostre treball a l'Antic Teatre, amb la intenció de reafirmar les coordenades de la meva proposta davant les reaccions irades d'algun espectador i de la programadora del teatre.

En Paradigma y crisis, primero de todo he intentado boicotear mis propias verdades tácitas en referencia a cómo debe ser un proceso de creación y a cómo y cuándo se debe poner en escena. Efectivamente, Semolina, Paradigma y crisis es un principio, un punto 0, una propuesta de trabajar con lo que hay: dos cuerpos en movimiento, el tiempo, el espacio y algún elemento concreto común: un papel, un boli, un caramelo y un globo; y una acción robada a la realidad cotidiana: una persona pintando una pared. Éste es un trabajo que intenta no proponer un camino a seguir, que se construye hacia ningún lugar, en el que no hay ningún tipo de jerarquías entre cuerpo, objeto, espacio, tiempo, sonido, luz … es un todo a la vez y nada, y bueno, Armando, más que el calentamiento previo al partido de fútbol, es el propio partido pero sin goles. En la escena lo útil se hace inútil, como pintar una pared, y lo inútil, como dos cuerpos en permanente movimiento hacia ningún lugar, se hace útil. Bea y Aimar, los intérpretes de este trabajo (grandes profesionales, por cierto) trabajan la dispersión y la concentración al límite, hasta conseguir que las dos sean una misma cosa, y en este territorio, ingrávido y laxo, invitan a que la mirada viaje con total libertad, sin imponer nada. Indudablemente es una propuesta escénica que intenta poner en crisis nociones tan arraigadas en nuestro pensamiento y en nuestra manera de funcionar como porqué, para qué, hacia dónde y es una invitación a encontrarse con aquello más abstracto, más inatrapable, menos lineal y más circular que también forma parte de la realidad y de los que la danza es cómplice ancestral.
Por lo pronto parece claro que las propuestas abiertas descolocan, que la libertad da miedo, que las expectativas son grandes trampas y que no hay nada como la inocencia o su reverso, la madurez, para acercarse a estos lugares insatisfactorios (qué palabra más egocéntrica y fea: satisfacción).
Pues siento no haberte satisfecho Armando, y más si antes has disfrutado de otros trabajos de Las Santas, pero el arte contemporáneo, como tú sabes, es ante todo, un terreno de LIBERTAD y de PRESENTE , dos de las pocas palabras que mantienen todo su sentido hoy en día.
El único punto de tus comentarios en que siento la impetuosa necesidad de defenderme y defender a todos los profesionales involucrados en este proyecto es en lo referente a la seriedad del trabajo y a su riesgo, ambos existen.
Por último te invito a que veas Ella entra, mi anterior trabajo, del cual éste es su cara opuesta.

Silvia Sant Funk/Las Santas