La investigación se desarrolla en dos líneas, por un lado, se desea explorar las fisicalidades maricas y trans empoderándolas desde su capacidad de aceptar lo blando. Alejándose de una imposición desde lo fuerte y la presencia intimidante hetero, este monstruo del nudo habita en lo blando, en las articulaciones sueltas y la presencia esquiva. Su manera de atacar la realidad es jugar con las contrariedades propias del nudo: las del deseo, el placer y el dolor, la otra línea de investigación se centra en las potencias que ofrece la huida del cuerpo, esa huida de la realidad que el monstruo del nudo nos ofrece. Busca la precipitación del cuerpo hacia las dimensiones del nudo, que diluyen los límites físicos del cuerpo, el movimiento y la presencia. En definitiva, una investigación hacia una ciencia ficción de la danza que explora la capacidad trans de manipular y recapacitar el cuerpo.
Aparece el concepto de ciborg, que como Donna Haraway defiende, es una potencialidad intrínseca de las disidencias que desmonta los binomios del pensamiento patriarcal; humano-inhumano, vivo-muerto, natural-sintético, mujer-hombre, etc. Así, se explorarán las maneras en las que ciertas prótesisdel cuerpo y tecnologías digitales pueden expandir tanto el movimiento como la presencia más allá del cuerpo.